Detectar Deep Fakes en Videollamadas

La clave está en el rostro de perfil. En la imagen, un ejemplo de cómo un retrato de perfil de una persona se convierte en una especie de barroco de baja calidad en un deep fake.

Los algoritmos de inteligencia artificial que detectan los deep fakes son muy efectivos, pero suelen estar entrenados para detectar, por ejemplo, si la boca está moviéndose de una forma que no encaja con los movimientos de la nariz o con los de los ojos. Eso funciona en depresión, pero no en perfil. En perfil, uno puede ver los movimientos del labio superior, pero no se puede ver la nariz ni los ojos, y la boca sigue pareciendo una boca.

Quizá por eso, porque es más fácil de hacer o porque es más efectivo en la parte frontal de la cara, los deep fakes a menudo son mejores cuando la otra persona está de frente. Pero en perfil, aunque la boca parezca correcta, se puede ver una especie de deformación del rostro, en la que los rasgos se mueven de forma extraña y el rostro pierde toda su naturalidad. Es como si la persona hubiera comido un alimento indigesto y tuviera una cara de dolor.

Por supuesto, esta técnica no sirve para todos los casos, pero si se sospecha que alguien está usando un deep fake, es una forma muy sencilla de comprobar si es cierto. Y aunque esta técnica no sirve para todos los casos, parece que es una forma muy sencilla de detectar deep fakes en tiempo real, y eso es más de lo que se puede decir de muchos de los métodos de detección que se utilizan actualmente.